El próximo 19 de junio, el Centro Experto en Teledetección de Barcelona (BEC), celebrará una jornada para conmemorar sus diez años de existencia. Tendrá lugar en su sede, el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC en Barcelona.
El próximo 19 de junio, el Centro Experto en Teledetección de Barcelona (BEC), celebrará una jornada para conmemorar sus diez años de existencia. Tendrá lugar en su sede, el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC en Barcelona.
En la jornada se contará con la asistencia del investigador del CSIC Jordi Font, fundador del centro y uno de los investigadores principales de la misión SMOS; Susanne Mecklenburg, de la ESA y Mission Manager de SMOS; Cristina de la Puente, vicepresidenta del CSIC; Andrea Pérez Carro, CDTI, delegada española en la ESA; y Meritxell Serret, Consellera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat de Catalunya.
También participarán investigadores del CSIC y de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) involucrados en la SMOS, junto con representantes de empresas (Airbus, Tryo Aeropace, Deimos) y de otras instituciones científicas, que hablarán sobre el impacto tecnológico y social de la misión así como de las aplicaciones (se adjunta programa).
Entre otras aplicaciones, se presentaran los mapas de salinidad del Mediterráneo, que ha conseguido obtener el BEC, el único centro en el mundo que produce y distribuye estos mapas. Para ello, han desarrollado métodos que mejoran la resolución espacial y temporal, y permiten tener mapas de salinidad diarios con una resolución de 5 km cada día. Estos mapas aportan información sobre el estado del mar y permiten anticipar si habrá fuertes precipitaciones.
Iniciativa conjunta
El BEC nació en 2007, bajo el liderazgo de Jordi Font, investigador del CSIC, para preparar el procesado de datos de la misión SMOS (Soil Moisture and Ocean Salinity) de la Agencia Espacial Europea (ESA), que se lanzó al espacio en 2009. Fue creado como una iniciativa conjunta del CSIC, a través del Departamento de Oceanografía Física y Tecnológica del Instituto de Ciencias del Mar (ICM), y de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), a través del Grupo de Investigación en Teledetección (Remote Sensing Lab), a la que más tarde se unió el Institut d’Estudis Espacials de Catalunya (IEEC). Antonio Turiel, investigador del CSIC, es el actual presidente del BEC; Carolina Gabarró, investigadora del CSIC, es la directora.
Comprender mejor el clima
El satélite SMOS recoge datos de humedad del suelo y de salinidad del mar, dos variables clave para conocer el ciclo del agua y mejorar nuestra comprensión del clima. No obstante, los datos en bruto del satélite deben ser procesados y refinados para obtener, a partir de ellos, productos como mapas de humedad y de salinidad útiles para la comunidad científica y operacional. Ésta es precisamente la misión del BEC.
Entre sus logros, el centro desarrolló un método para integrar los datos de SMOS de baja resolución con información complementaria de otros sensores de más alta resolución, para generar los primeros mapas de humedad con una resolución de sólo 1 km. Estos mapas permiten usos diversos, como conocer el contenido de agua útil en el suelo por las plantas y prever la productividad de los campos, o evaluar el riesgo de incendios en zonas concretas y por tanto, poder tomar medidas preventivas (limpieza de los bosques o crear cortafuegos) de forma más dirigida y eficaz, entre otros.
El conocimiento de la salinidad superficial del mar permite mejorar las estimaciones de las corrientes marinas, informar sobre la actividad biológica y la presencia de bancos de peces, y estimar el grado de evaporación de la superficie del mar para anticipar fenómenos de fuerte precipitación sobre tierra con una anticipación que puede llegar a ser de dos meses.
Desde su creación, el Centro ha dado apoyo a la ESA para la calibración del instrumento del satélite SMOS, así como en la validación de datos y en la mejora de sus algoritmos de procesado. Desde hace algún tiempo, el BEC ha ampliado sus intereses y se ocupa también del estudio de los vientos sobre el mar y de la evolución del hielo marino. También ha comenzado a incorporar datos de otros satélites y sensores, tanto activos como pasivos. Con el paso del tiempo, el BEC se ha convertido en un referente en su campo, y recibe cada año a estudiantes y científicos de otras instituciones.
Más información: Programa del 10º aniversario
Nota de prensa: Delegación CSIC Cataluña