Noticias | 27 Noviembre 2025

La BioMARató 2025 consigue la primera cobertura completa del litoral catalán, con más de 2.000 especies registradas

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Las observaciones ciudadanas ilustran la floración anticipada de la posidonia en el norte de Cataluña y la expansión de especies tropicales, como la vieja canaria y la babosa del sargazo.

La especie Scyllaea pelagica es típica de mares tropicales y subtropicales como el Caribe y el golfo de México / © Enric Badosa.
La especie Scyllaea pelagica es típica de mares tropicales y subtropicales como el Caribe y el golfo de México / © Enric Badosa.

La quinta edición de la BioMARató, coordinada por el Grupo EMBIMOS del Institut de Ciències del Mar (ICM-CSIC), ha alcanzado un hito sin precedentes: obtener datos de biodiversidad marina en todos los tramos de la costa catalana. Por primera vez desde el inicio del proyecto, el litoral se ha cubierto íntegramente gracias a la participación ciudadana, lo que ha permitido completar el mapa de observaciones con una resolución espacial inédita hasta ahora.

Esta cobertura total, estructurada en sectores de 10 km², ha ido acompañada de un notable incremento de la participación y de los resultados. Entre mayo y octubre, más de 520 personas han aportado 94.000 observaciones a la plataforma MINKA, y se han identificado 2.040 especies, casi 300 más que en 2024. Con estas nuevas aportaciones, la BioMARató acumula desde 2020 más de 380.000 observaciones y 2.870 especies documentadas.

“La BioMARató demuestra el potencial de la ciencia ciudadana para generar información con una resolución espacial y temporal que difícilmente puede alcanzar un proyecto científico convencional”, destaca Jaume Piera, del grupo EMBIMOS del ICM-CSIC y coordinador de la iniciativa. “Esta cobertura total nos acerca a disponer de herramientas clave para el estudio y seguimiento de la biodiversidad, o 'productos operacionales' como los mapas de biodiversidad a gran escala, esenciales para mejorar la gestión de nuestros mares”, añade el investigador.

La iniciativa, que recoge todas las observaciones en la plataforma de ciencia ciudadana MINKA, ha contado con la colaboración de la Federación Catalana de Actividades Subacuáticas (FECDAS), la Asociación Oceánicos, Plàncton Diving, Anèl·lides - Serveis Ambientals Marins y Xatrac, especialmente en la organización de salidas de fotografía submarina, snorkel y buceo a lo largo de las provincias de Girona, Barcelona y Tarragona.

Nuevos registros en el litoral catalán

Entre los hallazgos más relevantes de la BioMARató 2025 destaca la primera cita en Cataluña del cangrejo de la especie Afropisa carinimana, observado por primera vez por el aficionado Enric Badosa en la zona de Canet de Mar. Se trata de una especie de cuerpo alargado y coloración pálida de la familia Pisaidae, procedente de las costas tropicales atlánticas. Este primer registro constituye el primero en el litoral catalán y es la cita más septentrional del Mediterráneo.

Además de este descubrimiento, la BioMARató 2025 ha incorporado 159 especies nuevas a su listado, en su mayoría plantas litorales. Aunque muchas ya habían sido documentadas en Cataluña, es la primera vez que se observan en el marco de la BioMARató, lo que refuerza el papel de la iniciativa para mejorar el conocimiento de la biodiversidad y reducir vacíos de información en el litoral catalán.

La expansión de especies tropicales

El seguimiento ciudadano ha permitido detectar la continua expansión de especies de origen tropical y subtropical en la costa catalana. Un ejemplo destacado es el pez vieja canaria (Sparisoma cretense), que ha pasado de un único registro en 2024, en Blanes, a diez observaciones en 2025, repartidas entre Tarragona y Girona. 

“Cada vez lo vemos más a menudo en inmersiones poco profundas”, explica Lisa Derksen Castillo, buceadora participante en la BioMARató. “Su color rojizo es inconfundible y antes era impensable encontrarlo aquí”.

También se ha vuelto a observar la babosa marina del sargazo (Scyllaea pelagica), detectada por primera vez en el Mediterráneo occidental durante la edición de 2023 y reportada este año en 18 ocasiones. Esta especie de nudibranquio, un pequeño molusco sin concha de tonos amarillos y verdosos, habita sobre masas de algas flotantes del género Sargassum, típicas de mares tropicales y subtropicales como el Caribe y el Golfo de México. Su presencia creciente en el Mediterráneo occidental sugiere una ampliación de su rango de distribución asociada al aumento de la temperatura del agua.

Otros efectos del calentamiento

El aumento de la temperatura del mar no solo puede modificar la distribución de las especies, sino también sus ciclos biológicos y comportamientos naturales. Un ejemplo reciente es la floración temprana de Posidonia oceanica, observada este año en el Alt Empordà, en Cala Montgó (L’Escala) el 7 de septiembre y, una semana después, aún más al norte, en Cadaqués, por el aficionado Ferran Roure. 

“Hasta ahora, las primeras floraciones reportadas en la BioMARató se habían registrado en la provincia de Tarragona, por eso sorprende verlas tan temprano y tan al norte, posiblemente como respuesta al estrés térmico acumulado este verano”, explica Xavier Salvador, técnico de MINKA. 

Paralelamente, se han registrado cuatro ejemplares de mero (Epinephelus marginatus) posiblemente afectados por betanodavirus, un patógeno que puede infectar diversas especies de peces y cuya incidencia aumenta en aguas más cálidas. 

Los análisis del ICM-CSIC confirman que los últimos años han estado marcados por un calentamiento persistente y varias olas de calor marinas, con episodios especialmente intensos en septiembre de 2022, octubre de 2024 y la segunda mitad de septiembre de 2025. Según los datos de la serie oceanográfica de L’Estartit (mantenida con apoyo del ICM-CSIC), este año también se registró un episodio destacado a finales de junio y principios de julio, con un récord de 26,8 °C y anomalías en la cuenca catalano-balear de unos +5 °C, con temperaturas propias de agosto. 

Aun así, agosto de 2025 no ha resultado tan extremo como otros veranos recientes, como el de 2023. En conjunto, las temperaturas de 2025 se han mantenido buena parte del verano, e incluso del invierno anterior, por encima del percentil 90. Este patrón puede consultarse en el producto de olas de calor marinas de ICATMAR.

El año de las pastinacas y las mantas 

El 2025 también ha sido un año especialmente rico en observaciones de rayas y mantas, con más de 390 registros de elasmobranquios correspondientes a 14 especies diferentes en las tres provincias catalanas. Entre ellas destaca la raya mariposa (Gymnura altavela), una especie hasta ahora muy poco frecuente en Cataluña que este año se ha registrado en 15 ocasiones, con varias observaciones en la provincia de Girona, donde no se había detectado en ninguna BioMARató anterior. 

Estos peces cartilaginosos responden de manera desigual al calentamiento global del mar: mientras algunas especies tienden a acercarse a la costa en aguas más cálidas, como las mantas (familia Mobulidae) y las pastinacas (Dasyatis pastinaca), otras, como las rayas (familia Rajidae), pueden replegarse hacia zonas más profundas y frías. 

A pesar del aumento de observaciones registradas este año, más citas no siempre significan una mayor abundancia de individuos, sino a menudo una mayor actividad de observación o una mejor cobertura del litoral gracias a la participación ciudadana. Por ello es tan importante contextualizar estas observaciones y mantener este seguimiento en el tiempo: para comprender bien los cambios reales en las poblaciones de especies.