Noticias | 07 Octubre 2015

Volcanes submarinos podrían atenuar la magnitud de ciertos terremotos

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El 1 de abril de 2014, un terremoto en la zona de la ciudad de Iquique alcanzó una magnitud de 8,1 y provocó un tsunami. Pese a su gravedad, los expertos se sorprendieron de que el seísmo fuera menor y menos dañino de lo esperado, y que afectara tan solo a un área limitada.

Fuente: Nature Communications

El 1 de abril de 2014, un terremoto en la zona de la ciudad de Iquique alcanzó una magnitud de 8,1 y provocó un tsunami. Pese a su gravedad, los expertos se sorprendieron de que el seísmo fuera menor y menos dañino de lo esperado, y que afectara tan solo a un área limitada. Geólogos del ICM, del Helmholtz Centre for Ocean Research Kiel (GEOMAR) y del Instituto Alemán de Geociencias y Recursos Naturales han publicado en la revista Nature Communications una posible explicación de que ese temblor fuera menor de lo esperado.

La razón de la alta frecuencia de terremotos en Chile se encuentra justo al lado de la costa, donde la placa oceánica de Nazca, una de las placas tectónicas del Pacífico, se hunde por debajo de la placa Sudamericana. Esto provoca la acumulación de tensión en la corteza terrestre que tarde o temprano, se libera y da lugar a un terremoto.

"En el norte de Chile, sin embargo, existe un amplio intervalo de 550 kilómetros que no ha experimentado ningún terremoto importante desde 1877", afirma el autor principal del estudio, Jacob Geersen, de GEOMAR. "Los expertos esperan que se produzca el próximo mega-terremoto dentro de esta laguna sísmica. Inicialmente, muchos científicos creyeron que el terremoto del 1 de abril del 2014 era este mega-terremoto esperado. Pero este seísmo solo afectó la parte central del intervalo y se mantuvo muy por debajo de la magnitud esperada, de hasta a 9,0", añade Geersen.

Para entender la razón de la baja intensidad del terremoto de Iquique, el equipo de geólogos estudió la topografía del norte de Chile en combinación con imágenes sísmicas del subsuelo con el fin de desvelar la estructura terrestre profunda bajo el fondo marino. “Resulta que el fondo marino de la placa de Nazca en la región afectada no es totalmente plano. Al contrario, hay numerosos volcanes extintos, los llamados montes submarinos, algunos de ellos de varios kilómetros de altura ", describe César R. Ranero, profesor de investigación ICREA en el ICM que participó en el trabajo.

"Mediante el uso de datos sísmicos, identificamos varios montes submarinos antiguos, que ahora se encuentran en el límite entre las dos placas –la de Nazca y la Sudamericana–, con lo que realizan una deformación activa de esta zona de contacto y la placa Sudamericana que hay por encima", explicó Jacob Geersen. A causa de esta rugosidad y de las fracturas asociadas, el área alrededor de los montes submarinos de la zona de subducción acumula menos tensión, lo que atenúa el terremoto resultante. "Además, los montes submarinos de la zona de subducción probablemente detuvieron la propagación de la fractura sísmica en el espacio, durante el terremoto de Iquique", añadió.

Artículo de referencia:

Geersen, J., C. R. Ranero, U. Barckhausen, C. Reichert (2015): Subducting seamounts control interplate coupling and seismic rupture in the 2014 Iquique earthquake area. Nature Communications, https://dx.doi.org/10.1038/ncomms9267