El grupo de investigación trabaja, desde su origen en 1990, en la interacción continente-océano en el ecosistema litoral, relacionando los flujos continentales con sus efectos sobre el medio marino, principalmente el enriquecimiento nutricional de las aguas litorales y sus consecuencias: las proliferaciones algales nocivas y la eutrofización.
El estudio de estos procesos se aborda investigando los mecanismos que se consideran relevantes en los procesos biológicos y relacionando los aportes continentales con la estructura espacial y usos del territorio. El enfoque general es de ciencia básica, pero inmediatamente se relaciona con las demandas crecientes de criterios de gestión y legislación por parte de la sociedad y, en particular, de la Unión Europea, sobre la calidad ambiental, la salud y el bienestar de las personas.
El grupo tiene un fuerte compromiso con la divulgación científica.